"Protesto mucho ante los humos ajenos, soy beligerante. Creo que se pisotean los derechos del no fumador con una alegría acojonante. Somos un poco gilipollas. No sé cómo alguien puede argumentar que está bien que se fume en lugares donde se come o se manipulan alimentos, o donde hay gente trabajando, o niños... Es absurdo que se intente defender lo indefendible"
Santiago Segura
William B. Tensy en "Las Seductoras" |
El artículo de Javier Marías "Vejámenes "in the grounds"" (El País, 20-6-10) me ha indignado, como a muchos, y sospecho que quería tocarme las narices a mí, particularmente a mí, que tengo unos padres que le veneran, que me tienen la casa llena de sus libros, que le citan constantemente con arrobo, que tienen fotos suyas por las paredes. En fin, una pesadilla.
Nuestro rostro, el de los no fumadores, va a ser el único mañana. Su mañana será una úlcera, una lesión ocular o una piel envejecida hoy, mañana y pasado. Nuestro corazón, el de los no fumadores, va a ser el único blanco, el suyo será negro, negro alquitrán.
La imagen del fumador ya ha dejado de ser atractiva. Fíjense hasta que punto que el Verhoeven va a rodar un nuevo Instinto Básico para mostrarnos la secuencia de Sharon Stone sin cigarrito.
Comparar la prohibición del tabaco en un hotel con la de entrada al mismo según el color, la raza o el sexo es la repanocha. Su brillante argumentación para seguir fumando es que los hipócritas Estados se enriquecen con los pitillitos y que ellos mismos les incitaron a fumar, pues ¡dején de fumar, hombre, no me joda!
Usted y ese 35% de españoles del que habla, sólo demuestran algo que ya sabemos: hay mucho tontoelculo y tarado suelto. Así que les doy permiso para quedar todos juntos en la "Terminal Polivalente" del Puerto de Valencia y embarcarse a su isla paradisíaca con forma de cajetilla y palmeras con humo. No se preocupen, no les vamos a echar de menos.
Nuestro rostro, el de los no fumadores, va a ser el único mañana. Su mañana será una úlcera, una lesión ocular o una piel envejecida hoy, mañana y pasado. Nuestro corazón, el de los no fumadores, va a ser el único blanco, el suyo será negro, negro alquitrán.
La imagen del fumador ya ha dejado de ser atractiva. Fíjense hasta que punto que el Verhoeven va a rodar un nuevo Instinto Básico para mostrarnos la secuencia de Sharon Stone sin cigarrito.
Comparar la prohibición del tabaco en un hotel con la de entrada al mismo según el color, la raza o el sexo es la repanocha. Su brillante argumentación para seguir fumando es que los hipócritas Estados se enriquecen con los pitillitos y que ellos mismos les incitaron a fumar, pues ¡dején de fumar, hombre, no me joda!
Usted y ese 35% de españoles del que habla, sólo demuestran algo que ya sabemos: hay mucho tontoelculo y tarado suelto. Así que les doy permiso para quedar todos juntos en la "Terminal Polivalente" del Puerto de Valencia y embarcarse a su isla paradisíaca con forma de cajetilla y palmeras con humo. No se preocupen, no les vamos a echar de menos.
Ya sabes que fumo, pero estoy totalmente de acuerdo contigo... :))))
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